Musa y poeta

Erase una vez...
una musa y poeta.

Nació creyendo en el amor
y la mataron al advertirle
que el sentir convertía
al más valiente de los guerreros
en un simple prisionero.

Y no lo supo,
y no lo creyó
hasta que mil veces
golpearon su corazón
con palabras que salían
de una boca que solo
buscaba otras lágrimas
donde ahogar su dolor,
otro cuerpo donde desprenderse de su ira,
otros ojos donde reflejar su triste vida.

Y a partir de ese instante,
su corazón dejó de latir.
El poeta mató a la musa,
se desprendió de cada verso
y acabó convirtiéndose en poesía.











Comentarios

  1. Me encanta, de verdad!!! Sobre todo la última estrofa:)
    Un besito<33

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  2. Muy hermosas tus letras!!
    Besos

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  3. Una musa está destinada a convertirse en poesía, una musa-poeta destinada a lidiar con esa dualidad, aunque creo que una parte no debe matar a la otra.

    Dulces besos Naty y dulce semana para ti.

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  4. Siempre he sospechado que ciertas musas, mas que ayudar, se dedican a incordiar...

    Un abrazo, amiga

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  5. En el camino de la inspiración quizá importe menos el tránsito que el resultado final.

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  6. Al menos la musa siempre vivirá en forma de poesía

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  7. Las sirenas son musas de poetas y de gente corriente.Tienen el poder de seducir y a mi creeer de claudicar. Una vez escuché el canto de una Sirena Varada y le escribí este relato...Mas vale aprender que caer miles de veces pero claro, cada corazón es un mundo y quién quiera puede atragantarse de amor pèro para qué, si de engaños podemos deducir que no se vive.


    Viniste navegando en la deriva a merced de las corrientes marinas; de allá en la lejanía que se pierde en lo más profundo del mar azul. El atardecer, te depositó en la playa gracias a una ola que después de dejarte regresaba otra vez a la inmensidad como un espumoso adiós que acariciaba la arena. El sol jugaba en el horizonte ardiendo en medio de unas nubes candentes. Era una tarde de finales de Enero donde sólo estaba yo en aquel lugar. Me acerqué a tí mientras temblabas entre el miedo y la impotencia de no poder hacer nada. Tus ojos eran verdes como el agua más pura; tan profunda como tu mar Mediterráneo y...pasados unos minutos, el sol nos dejó a la luz de una luna de primavera de invierno. Las aguas del mar brillaban infestadas de reflejos plateados y un barquito cruzaba aquella estela. Te pregunte si necesitabas algo, si tenías frío después de aquel naufragio y tu, conocedora de la profundidad del alma, levantaste tu mano para tocar la mía...solo eso. Acaricie la palma de tu mano abierta como quién se abre al mundo y, en aquel momento entendí tu idioma...tan universal como el del corazón. Naciste en medio del océano y sólo entendías de libertad. Llegaste a esta playa y no era lo mismo. Quieres regresar al mar pero allí encuentras la soledad porque de tu especie solo quedas tú...ves a otro corazón y a el te das aún sin saber de lo falso que puede ser el hombre. Lloré al ver tu pureza y me abracé a tí como nunca lo hice con una mujer. Te arrastré por la arena y te devolví al mar que te vio nacer y justo al amanecer, cuando el sol inundó de llamaradas el horizonte de un nuevo día, desperté en medio de aquella playa con el sabor en mis labios de un beso del mar...Gracias a ti escribí este relato y gracias a mí, sentí lo que siento...

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  8. Me encanta. Creo que para ser poeta has tenido que haber disfrutado del amor y haberlo sufrido, de lo contrario, esos sentimientos no afloran.
    Besos

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  9. "La poesía se apoya en la biografía y de la leche agria se hace el requesón" dijo León Felipe.

    Seguramente que la empatía y el amor dejen a quienes los sienten inermes ante tanta gente armada, pero me niego a vivir sin sentir, robotizado, por miedo al daño que produce la emotividad... el más valiente de los guerreros no es el que vence sino el que convence (vencer daña por imposición, convencer es acordar por convicción)...

    Lo de las musas y los poetas es como las ondas de la radio... conectan los que están en la misma frecuencia (de pensamiento y sentimiento)...

    Abrazo.



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