Musa y poeta

Erase una vez... una musa y poeta. Nació creyendo en el amor y la mataron al advertirle que el sentir convertía al más valiente de los guerreros en un simple prisionero. Y no lo supo, y no lo creyó hasta que mil veces golpearon su corazón con palabras que salían de una boca que solo buscaba otras lágrimas donde ahogar su dolor, otro cuerpo donde desprenderse de su ira, otros ojos donde reflejar su triste vida. Y a partir de ese instante, su corazón dejó de latir. El poeta mató a la musa, se desprendió de cada verso y acabó convirtiéndose en poesía.